El Ayuntamiento ha cerrado la programación lúdica y cultural de este verano en el Castillo de Alcalá con el aplauso de más de 10.000 espectadores. El Plan Urban ha constatado el éxito de ‘La Torre de los Sueños’ que durante julio y agosto ha llevado al monumento espectáculos de teatro, flamenco, circo, poesía y cine duplicando la asistencia con respecto a la edición anterior.
El teniente de alcalde responsable del proyecto de iniciativa urbana, Salvador Escudero, hizo balance ayer en el acto de cierre de la programación y dejó claro que “el espectáculo debe continuar. Ha venido el doble de gente que el año pasado y estamos convencidos no sólo del impacto cultural y social, sino del retorno económico que genera en el territorio una programación continuada en el recinto fortificado”. El Patio de al Sima del Castillo fue escenario del último sueño de este verano, un epílogo que además de la valoración de los responsables del proyecto contó con la representación de la obra teatral ‘Peloto, Roscón y Martinazo’, escrita por la alcalareña Carmen Troncoso de Arce.
La oferta escénica en el interior de la Torre Mocha fue vista por un total de 5.500 espectadores, que en un 75% eran alcalareños. Entre el 25% restante predominaron las visitas desde otras localidades de la provincia y la capital, destacando Sevilla, Mairena del Alcor, Dos Hermanas y Montequinto.
Al Castillo han subido también espectadores llegados desde países como Argentina, Colombia, Méjico, Bélgica, Alemania, Italia, Francia, Polonia, Holanda y Marruecos; o localidades como Gerena, El Coronil, Huelva, San Fernando, Paradas, El Viso, Mairena del Aljarafe, Bormujos, Coria del Río, Almonte, Los Palacios, Lantejuela, Estepona, Utrera, Carmona, Granada, La Rinconada, San Juan de Aznalfarache, Salteras, Badajoz, Bollullos de la Mitación, Morón de la Frontera, Tomares, Algeciras, Cantabria, Burgos, León, Aroche, Cáceres, Toledo, Madrid y Barbate.
Estas cifras contrastan con las que arrojaron las anteriores ofertas escénicas. En la primera edición las visitas teatralizadas organizadas bajo el lema ‘Historia Viva’ asistieron más de 2.500 personas. Siguió el ciclo de verano de ‘La Torre Mocha’, con cine y teatro, y el programa escolar ‘Al Castillo yo subí’ dirigida fundamentalmente a un público infantil para la divulgación del valor patrimonial e histórico el entorno con relación al flamenco de Joaquín el de la Paula.
Junto a ‘La Torre de los Sueños’ ha funcionado este verano ‘Un Castillo de Cine’, que también ha mejorado los números de la primera edición gracias a las mejoras técnicas de imagen y sonido y a una programación variada, de calidad y del gusto de toda la familia. Más de 5.000 personas fueron al cine de verano en el interior del Castillo para disfrutar de 60 cortos, 20 películas y un sin fin de vivencias y emociones, recuperando una tradición no tan lejana en el tiempo.
‘Un Castillo de Cine’ ha contado con una asistencia media de 400 personas por emisión, lo que indica el gran alcance y la aceptación de esta actividad, sobre todo entre niños, adolescentes y familias enteras han disfrutado del séptimo arte en un marco monumental incomparable. Salvador Escudero ha felicitado a los técnicos que han hecho posible la oferta lúdica y cultural. También ha destacado el servicio de ambigú a cargo de la asociación de vecinos del barrio San Miguel.
El plan URBAN tiene entre sus grandes objetivos, por un lado, mejorar la conexión (tanto física como social) del barrio San Miguel–El Castillo con el resto de la ciudad, y por otro, poner en valor los elementos patrimoniales que se localizan en este espacio emblemático. Escudero insiste en la importancia del acercamiento físico del resto de la ciudad al ámbito Urban por medio de un programa de eventos que no sólo normalice el tránsito hacia el barrio, también que consiga divulgar el patrimonio que la ciudad posee de una forma lúdica y amena.
Es una línea de actuación que complementa la transformación física del entorno. En este sentido, destaca la reforma de la Calle San Fernando o calle Ancha, la zona de estacionamiento de la nueva Biblioteca y el Perejil, y la calle San Miguel. En la accesibilidad al barrio han sido claves la variante al antiguo Arco de San Miguel y su restauración patrimonial, convirtiéndose en un hermoso pórtico de entrada al lugar de origen de Alcalá de Guadaíra.
También están en marcha la reurbanización del Arrabal y de la Avda. del Águila, la limpieza de laderas, la mejora de los servicios de RSU y la recuperación para su transformación en un centro cívico de la antigua Iglesia de San Miguel, “un antiguo edificio que estaba en ruinas y que pronto abrirá sus puertas para nuestro uso y disfrute”.
El Plan Urban centra su estrategia en la recuperación y creación de nuevas infraestructuras, y en la puesta en valor de las mismas, para que la ciudad en su conjunto recupere y disfrute de este espacio emblemático que constituye el origen de la ciudad y su principal fuente de identidad.